Este libro es de literatura
fractal, que explicado en una imagen es cuando estás viendo en un espejo el
reflejo de otro espejo, y este se hace interminable, dicho por el autor es una
novela caleidoscópica.
Mientras lees te encuentras
rasgos de fantasía con realidad que se confunden, lo que resulta muy
interesante.
Les voy a contar mi caso
particular, la serie de casualidades que me ocurrieron con este libro: fui a la
feria del libro del zócalo de la ciudad de México y ya había comprado como 6
libros, tal vez suficientes para el día, pero entré a un puesto que se
anunciaba como parte del gobierno de Guanajuato, claramente había muchos sobre
la ciudad pero unos pocos de otro autor, que resultó ser el que estaba
atendiendo, me dijo que eran suyos y tomé uno para leer la sinopsis, para mi
sorpresa la editorial es Tombooktu, una editorial que se ha metido en mi vida
de muchas y muy agradables maneras este año, me sorprendió bastante la casualidad,
y Pablo Paniagua me comentó que ese libro que tenía en mis manos fue la primer
publicación de esa editorial, por lo que conocía muy bien a unas personas
maravillosas con las que la vida me cruzó. Más señales no podía esperar y
compré el libro, pero para mi sorpresa, de esto se trata el libro, de las
casualidades, de una historia dentro de otra historia, en la que se pierde un
poco el sentido del espacio y tiempo.
El inicio del libro es
maravilloso, y del cual aún no sé qué parte es creación del autor y qué parte
es realidad, porque google solo te da información sobre esta novela, así que
tendré que buscar por otro lado. Te atrapa desde el inicio con el asesinato de
un crítico de Jorge Luis Borges. Los protagonistas de esta novela que se torna
de espías son Aurora Yazbek una mexicana que estudia en España y Jorge Luis
Borges, un estudiante que lleva la penitencia en su nombre, ya que quiere ser
escritor.
*****
Se lleva las 5 estrellas,
tiene fluidez, originalidad, simplicidad, verosimilitud y un tema interesante.
Es una novela original y contundente.
Hay un punto que no me gustó
nada y también lo quiero compartir, el autor es español y en muchas partes de
la novela tiene un claro desagrado por México, si bien le da este trabajo al
personaje español me parece que deja de ser subjetivo y le transmite todo su
coraje y desagrado. Por poner un ejemplo hay una escena en la que el autor está
viendo las noticias y salen todos los eventos realmente malos que han ocurrido
recientemente a lo largo de dos años, como si eso pasara en un solo día,
secuestros, descabezados, el incendio de la guardería, los desfalcos, colgados,
las ligas, todo eso en un mal día de México. También habla de las
construcciones y la basura, de la gente que no lee, pero no como una
descripción objetiva, percibo cierto resentimiento y me genera coraje, no es
que quiera que pinte una realidad que no existe, pero sentí muy cargado todo
hacia el lado malo en todas las ocasiones.
Por otro lado, el capítulo
25 me parece magistral, estás ya muy dentro de la trama, hay una serie de
casualidades y repeticiones muy bien llevadas, en las que incluso se menciona
al autor Pablo Paniagua como una cita de los personajes, me sacó una gran
sonrisa, lo que siento que arruina este gran momento es una nota al pie de
página donde se avisa que el ensayo está al final del libro, me hubiera gustado
más encontrarlo por mí misma, o que avisaran en otro momento, no en esta
cúspide de lo fractal.
Conclusión: muy buen libro,
solo espero que el autor ya vea un mejor lado de México y haya conocido a más
gente que le guste leer.
Recomendado: para todos los
que estén buscado algo original y diferente, para los que amen las
casualidades, para los que quieran disfrutar de un gran libro.
Y a los que yo, que no nos
gusta que digan cosas exageradas sobre la situación de nuestro amado país,
tomemos un respiro, dejemos descansar un rato el libro y pensemos que solo lo
dijo el personaje.
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ResponderEliminarMuchas gracias por la reseña. Respecto a lo que comentas, de mi crítica a la violencia de México, con esa progresión de hechos dramáticos que aparecen en un solo noticiero de la televisión (no hay que olvidar que es una novela fractal, de ahí dicha repetición), es un claro señalamiento a "la Guerra contra el narco" iniciada por ese inepto de Felipe Calderón; además, creo yo, para mejorar a este país hay que ejercer ese la crítica, y se vale hacerlo en una novela como registro de la violencia social de estos años... ¿Cuántos son los miles de desaparecidos en México? Cuando escribí esta novela aún estaban vivos los 43 de Ayotzinapa... En esa parte del libro, de algún modo, represento lo que es una realidad en México, cuando en dicha novela, por demás, se hace una defensa de la legalización de las drogas, todo lo contrario de la política, en ese momento, del inepto de Felipe Calderón. México no cambia, ni mejora, porque la mayoría de los mexicanos acepta esta realidad como algo natural, como el avestruz que esconde la cabeza para no ver la realidad, pues para cambiar hay ejercer la crítica de manera contundente y directa, como hago en "La novela perdida de Borges".
ResponderEliminarSoy un mexicano responsable y comprometido para sacar adelante este país, aunque sea a través de la crítica social por medio de la literatura, además, creo, me quedé corto con esa sucesión de hechos dramáticos… Y respecto a la suciedad de las calles de Guanajuato, son las de mi barrio que habitualmente están así (a diario pago a una persona para que lave la calle junto a mi casa donde se apilan las bolsas de basura, porque ahí las dejan y las echan a cualquier hora).
Amo a México, que es un país maravilloso, pero estimo que para muchos mexicanos no es así porque ni siquiera ejercen la crítica ni hacen nada para cambiarlo a mejor: les vale como está y hacen condena de cualquier crítica ajena como un acto de nacionalismo y defensa de la patria, y así no vamos ningún lado…
Y una incorrección en la reseña: "Hay un punto que no me gustó nada y también lo quiero compartir, el autor es español y en muchas partes de la novela tiene un claro desagrado por México..."
ResponderEliminarHe de señalar que soy mexicano, así lo indican mi credencial de elector y pasaporte, y repito que ejercer la crítica y señalar lo malo que ocurre en mi país es en acto de responsabilidad, y decir que tengo "un claro desagrado por México" me parece un comentario peyorativo e incluso xenófobo, de alguien que muestra, de manera conceptual a través de una obra literaria, una problemática social de nuestro país. ¿Crees que a los familiares de los miles de desaparecidos les parecerá excesiva esa parte de la novela?
No comprendiste que las críticas van hacia esos que se creen muy mexicanos pero que, en realidad, no aman a su país, y aquí va el extracto de la novela que lo resume:
ResponderEliminar"Y llegamos a la plaza principal, circundada por setos gigantes y música de mariachis, con el Teatro Juárez de fondo y una iglesia barroca, y entonces exclamé: “¡Qué bonita es Guanajuato!” Parecía mentira, e incluso una vejación, que muchos de sus habitantes no se dieran cuenta de este detalle para mancillarla con tanta basura y suciedad. ¡México! ¡Un país maravilloso destrozado a diario! ¡El desamor a la tierra! Pero ahora sonaban los mariachis, con tan magnífico escenario, y apareció el otro México posible, la excepción: sin cabezas cortadas, sin secuestros, sin robos, sin cables eléctricos ni suciedad; el brillo de una sonrisa frente a la terrible realidad de un país devastado por la ignorancia, saqueado históricamente por sus dirigentes. Y así, de nuevo, llegué a la conclusión de que en México son pocos los que leen."